Esta imagen representa a San José como padre protector y custodio de Jesús, sosteniéndolo con ternura en su brazo izquierdo mientras porta en la mano derecha un ramo de lirios, símbolo de pureza y obediencia.
El modelo transmite el vínculo profundo entre San José y el Niño, así como la sencillez, el silencio y la fidelidad que caracterizaron su vida.
Materiales y diseño.
Elaborada en resina de poliéster y pintada a mano.
San José aparece con túnica verde y manto rojo con detalles dorados, de pie sobre una base hexagonal oscura.
En su brazo lleva al Niño Jesús, vestido con túnica blanca, con rostro dulce y sereno.
San José sostiene un ramo de lirios blancos en la mano derecha, y ambos presentan una expresión de calma y ternura.
Medidas.
Altura:
13 cm.
Acabado.
Pintura en tonos naturales con bordes dorados decorativos en el manto.
El acabado es mate con detalles brillantes en las zonas ornamentadas.
La escultura presenta buena definición en los rostros, flores y vestiduras, destacando su estilo clásico y devocional.
Uso devocional.
Perfecta para colocar en hogares, escritorios, estanterías o rincones de oración.
Muy recomendada como regalo para el Día del Padre, bautizos o confirmaciones, así como signo de protección familiar y modelo de paternidad espiritual.
Resumen.
Una imagen sobria, tierna y espiritual de San José con el Niño, que invita a la oración confiada y al reconocimiento del papel esencial de San José en la historia de la salvación..

Esta figura representa a San José como custodio del Redentor, en una de sus posturas más tradicionales:
de pie, con el Niño Jesús en brazos y sosteniendo un ramo de lirios, símbolo de su pureza y fidelidad.
Su mirada serena y paternal refleja su misión silenciosa pero fundamental dentro del plan de salvación.
Materiales y diseño.
Figura elaborada en resina de poliéster y pintada a mano.
San José viste túnica verde con manto ocre-anaranjado, rematado con detalles dorados.
En el brazo izquierdo sostiene al Niño Jesús, quien aparece sonriente y con túnica blanca.
En la mano derecha porta lirios blancos.
La base es negra, de forma octogonal, estable y sobria.
Medidas.
Altura:
32 cm.
Base:
aproximadamente 11 x 10 cm.
Acabado.
Acabado satinado, con aplicación de pintura limpia y bien contrastada.
Los detalles dorados en los bordes del manto y los pliegues están bien trabajados.
El rostro de San José transmite serenidad y firmeza, mientras que el Niño muestra ternura y acogida.
La figura destaca por su equilibrio entre solemnidad y devoción.
Uso devocional.
Ideal para parroquias, oratorios, hogares, colegios, comunidades religiosas o como figura principal en altares dedicados a San José.
Muy adecuada como regalo para familias, matrimonios, padres y personas que deseen encomendar su hogar a la protección de este gran santo.
Resumen.
Una figura imponente y serena que recuerda el valor del servicio humilde y protector de San José.
Un modelo de fe silenciosa y paternal que acompaña con firmeza y amor.
Perfecta para quienes buscan una imagen devocional de gran presencia..

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