San Juan Evangelista, apóstol amado por Jesús y autor del cuarto Evangelio, es representado en esta imagen con sus símbolos tradicionales:
el cáliz con la serpiente y el águila, que alude a su visión elevada y espiritual.
Figura clave en el Nuevo Testamento, es patrón de escritores, teólogos, editores y comunidades contemplativas.
Materiales y diseño.
Modelada en resina de poliéster y pintada a mano con gran precisión.
San Juan aparece de pie, con túnica blanca y manto rojo vino con detalles dorados.
Sostiene en la mano izquierda un pergamino abierto, símbolo de su evangelio inspirado por el Espíritu.
En la derecha, un cáliz del que asoma una serpiente, en referencia a la tradición que relata cómo bebió un veneno que no le hizo daño.
A sus pies, un águila de alas recogidas completa su iconografía.
La base redonda presenta una cenefa dorada con acabado clásico.
Medidas.
Altura:
20 cm.
Acabado.
Pintura detallada en tonos cálidos, con acabado mate y realces dorados en bordes y base.
Los elementos simbólicos —el águila, el cáliz, el pergamino— están modelados con nitidez y profundidad.
Uso devocional.
Ideal para altares domésticos, bibliotecas, escritorios de estudio, parroquias o salas de lectura espiritual.
Especialmente recomendable para quienes escriben, enseñan o profundizan en la teología y para quienes buscan inspiración y fidelidad al mensaje de Cristo.
Resumen.
Una imagen sólida y expresiva de San Juan Evangelista, que transmite profundidad espiritual, sabiduría y fidelidad.
Perfecta para quienes desean mantener cerca el testimonio del discípulo amado..

Buscando posada.