Imagen tierna de la Virgen María sosteniendo al Niño Jesús, quien sujeta un racimo de uvas, símbolo eucarístico por excelencia.
La expresión serena de la Virgen y la actitud juguetona del Niño transmiten una calidez entrañable.
El manto azul con vivos dorados enmarca la escena con elegancia y movimiento.
Materiales y acabado.
Escultura realizada artesanalmente en madera de tilo o arce, tallada a mano por artesanos italianos de Val Gardena.
Disponible en diferentes acabados:
natural, tintado, policromado o con pan de oro.
Los detalles anatómicos, los pliegues de las vestiduras y el realismo del rostro reflejan una ejecución minuciosa.
Medidas disponibles.
Fabricada en varios tamaños, manteniendo proporción y calidad en todos los formatos.
Apta tanto para espacios litúrgicos como para devoción privada.
Uso recomendado.
Ideal para devoción mariana en hogares, colegios o capillas.
Su simbolismo eucarístico también la convierte en una excelente opción para celebraciones sacramentales.
Resumen.
Una representación serena y amorosa de la Virgen con el Niño, donde el detalle del racimo de uvas añade una dimensión simbólica que realza su belleza espiritual.
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