Portaviáticos de pequeño formato, ideal para custodiar una sola forma consagrada.
Decorado con una medalla esmaltada que representa una paloma blanca, símbolo del Espíritu Santo, descendiendo sobre un cáliz mientras porta un ramo de olivo.
El fondo en tonos rojo burdeos y dorado enmarca la escena con fuerza simbólica y belleza litúrgica.
Materiales y diseño:
Fabricado en metal con acabado dorado brillante.
La tapa incorpora una medalla de esmalte con colores vivos y contrastantes, que transmiten un mensaje de paz, consagración y presencia del Espíritu Santo.
Su tamaño compacto y su ligereza lo hacen especialmente práctico para el uso diario.
Cuenta con cierre a presión y anilla superior para llevar colgado.
Medidas:
Diámetro:
4 cm.
Uso litúrgico:
Pensado para llevar una única forma consagrada, es ideal para ministros extraordinarios de la comunión, sacerdotes o religiosos en visitas individuales, especialmente en hospitales o residencias.
Su diseño delicado y su simbolismo lo hacen perfecto también para contextos catequéticos o confirmaciones.
Un portaviáticos pequeño en tamaño, pero grande en significado.
Custodia el Santísimo con sencillez, paz y belleza espiritual en cada visita pastoral..