San Uriel, cuyo nombre significa “Fuego de Dios” o “Luz de Dios”, es reconocido como uno de los arcángeles que portan sabiduría, justicia y guía espiritual. Esta figura lo representa con una espada en una mano y un ramo de flores blancas en la otra, simbolizando la combinación de fuerza y pureza. Su expresión es serena y decidida, invitando a la reflexión y al discernimiento espiritual. Materiales y diseño. Figura elaborada en resina de poliéster y pintada a mano. San Uriel aparece vestido con túnica blanca y manto verde, con bordes dorados. Porta una espada plateada en la mano derecha y un ramillete de flores en la izquierda. Las alas doradas están bien texturizadas y abiertas en actitud de protección. La figura se apoya sobre una base ovalada de tono piedra. Medidas. Altura: 8 cm. Base: 4 x 2 cm. Acabado. Acabado satinado, con especial atención a los detalles del rostro, el filo de la espada y el colorido del ramo. La pintura está aplicada con precisión a pesar del pequeño formato. Las alas doradas y el manto verde contrastan elegantemente con la túnica clara. Uso devocional. Ideal para escritorios, altares personales, carteras o como obsequio para quienes buscan protección, iluminación espiritual o ayuda en decisiones importantes. Muy recomendada para estudiantes, catequistas y personas dedicadas al discernimiento. Resumen. Una figura pequeña pero cargada de simbolismo, que recuerda la luz y la justicia de Dios presente en cada decisión que tomamos. San Uriel es guía, defensa y claridad en los momentos de duda o confusión..