Santa Catalina de Siena, virgen dominica, mística, consejera de papas y doctora de la Iglesia, es un modelo de sabiduría espiritual, valentía profética y amor ardiente por Cristo y la Iglesia.
Esta imagen la presenta en su iconografía clásica, con hábito dominico, libro en una mano y flores blancas en la otra, símbolos de su pureza y sabiduría.
Materiales y diseño.
Figura en resina de poliéster, pintada a mano.
Santa Catalina aparece de pie, vestida con el hábito blanco y manto marrón propio de las terciarias dominicas.
En su brazo izquierdo sostiene un ramo de lirios blancos, y en el derecho un libro cerrado de cubierta roja.
El rostro sereno expresa contemplación y recogimiento.
La figura reposa sobre una base circular dorada decorada en relieve.
Medidas.
Altura:
20 cm.
Base:
7 x 6 cm.
Acabado.
Pintura en tonos suaves, con acabado mate en el hábito y toques brillantes en la base y los bordes dorados del manto.
El rostro y los elementos que sostiene están finamente definidos.
El conjunto transmite sobriedad, espiritualidad y elegancia.
Uso devocional.
Ideal para altares, oratorios, bibliotecas, centros de formación religiosa o como regalo devocional en aniversarios de consagración, celebraciones dominicas o confirmaciones.
También es una figura muy adecuada para personas que buscan sabiduría y guía espiritual en tiempos de discernimiento.
Resumen.
Una imagen solemne, sobria y profundamente simbólica de Santa Catalina de Siena, que inspira fortaleza, oración y fidelidad al Evangelio.
Perfecta para quienes desean tener cerca el ejemplo de esta gran doctora de la Iglesia..