Este cáliz de proporciones armoniosas y diseño clásico está pensado para un Uso litúrgico regular, combinando funcionalidad con una estética sobria y elegante.
Su capacidad de 300 ml lo hace especialmente práctico para celebraciones comunitarias.
Materiales y diseño.
Fabricado en metal con acabado dorado brillante, presenta una copa lisa de forma alta y ligeramente acampanada.
El fuste está rematado por un nudo central de forma esférica, finamente decorado con relieves geométricos, que aporta firmeza en el agarre y una nota ornamental sobria.
La base, de forma cónica ancha, proporciona una excelente estabilidad al conjunto.
Medidas.
Altura:
21 cm.
Diámetro de la copa:
9,5 cm.
Capacidad:
300 ml.
Uso litúrgico.
Apropiado para misas parroquiales, altares auxiliares, concelebraciones o como cáliz personal de sacerdotes y diáconos.
Su diseño atemporal facilita su uso tanto en entornos tradicionales como contemporáneos.
Una pieza práctica, estable y digna para el altar.
Este cáliz ofrece un equilibrio perfecto entre elegancia, capacidad y funcionalidad al servicio de la liturgia cotidiana..

Medalla circular elaborada en plata de ley con acabado lacado brillante, que representa en relieve a Santa Cristina, virgen y mártir, rodeada por llamas, símbolo de los tormentos que sufrió por su fe.
La santa aparece de pie, con aureola, en actitud serena y firme, mientras las llamas la envuelven, evocando su fortaleza y fidelidad ante la persecución.
La inscripción “SAINTE CHRISTINE” aparece en francés, reflejando la devoción internacional hacia esta mártir, especialmente en contextos europeos.
Medidas: Disponibles en varias opciones (a elegir).
Material: Plata de ley.
Acabado: Lacado brillante con imagen en relieve.
Características: Imagen de Santa Cristina mártir entre llamas; inscripción en francés.
Ideal para: Devoción personal, personas que llevan su nombre, regalo espiritual o inspiración en la perseverancia en la fe.
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San Roque, peregrino y protector contra las epidemias, es una figura de gran devoción en toda Europa desde la Edad Media.
Esta imagen lo representa durante su enfermedad, mostrando la llaga en la pierna mientras es asistido por el perro que, según la tradición, le llevaba pan cada día.
Su figura encarna confianza en Dios en medio del sufrimiento, humildad y la esperanza en la sanación divina.
Materiales y diseño.
Figura tallada a mano en madera natural por escultores de Val Gardena.
San Roque aparece sentado, vestido con capa de peregrino decorada con conchas, bastón alto con calabaza y sombrero al hombro.
Muestra con la mano la llaga en su pierna, mientras a sus pies se encuentra el perro fiel, con mirada atenta y pan en la boca.
La postura es relajada pero expresiva, transmitiendo dolor sostenido con dignidad.
Medidas.
Altura:
a elegir con el selector.
Base:
poligonal, con suelo imitando roca o tierra.
Acabado.
Talla completamente artesanal, policromada a mano.
La paleta cromática incluye tonos tierra, burdeos y dorado envejecido.
El rostro de San Roque muestra serenidad, fatiga y oración interior.
El perro está esculpido con ternura y realismo.
La llaga está tratada con discreción, sin dramatismo excesivo.
El conjunto es sobrio, emotivo y lleno de simbolismo.
Uso devocional.
Ideal para parroquias, hospitales, capillas rurales, centros de atención sanitaria, residencias, asociaciones de peregrinos o lugares de oración por los enfermos.
También muy apropiada para espacios que buscan inspirar confianza en medio del dolor.
Resumen.
Una imagen profundamente humana que refleja la espiritualidad del sufrimiento ofrecido y acompañado.
San Roque, peregrino herido y asistido por Dios a través de su creación, sigue siendo intercesor y consuelo para los afligidos.
Esta talla une ternura, dignidad y devoción auténtica..