Santiago Apóstol, patrón de España y símbolo de la fe cristiana en la Reconquista, es aquí representado en su iconografía tradicional como “Santiago Matamoros”.
Montado en un caballo blanco y blandiendo su espada, se le muestra en plena batalla, mientras un enemigo yace a sus pies.
Esta imagen expresa el poder protector del santo, su papel como intercesor en los momentos de lucha y su defensa del cristianismo.
Materiales y diseño.
Figura tallada a mano en madera natural por escultores de Val Gardena.
Santiago aparece montado sobre un caballo alzado, con bandera blanca en una mano y espada en la otra.
Viste indumentaria medieval con capa corta, sombrero de ala ancha con concha jacobea y botas de viaje.
El caballo está ricamente decorado con bridas y detalles dorados.
Bajo sus patas, un guerrero derrotado con turbante y cimitarra remite a la simbología histórica de las batallas.
Todo el conjunto se apoya sobre una base ovalada.
Medidas.
Altura:
a elegir con el selector.
Base:
ovalada de madera, ligeramente elevada, con acabado liso.
Acabado.
Policromía realizada a mano con tonalidades ocres, doradas, rojas y blancas.
El caballo tiene expresión viva y dinámica.
El rostro de Santiago transmite firmeza sin agresividad.
La bandera ondea con movimiento natural, y los detalles del combate están esculpidos con gran precisión.
Cada elemento, desde las riendas hasta las vestiduras, refleja un altísimo nivel artesanal.
Uso devocional.
Ideal para parroquias dedicadas a Santiago, hermandades jacobeas, asociaciones culturales gallegas, capillas votivas o lugares vinculados a la tradición del Camino de Santiago.
También recomendada como imagen de protección en hogares y para devoción particular al Apóstol.
Resumen.
Una talla majestuosa que recoge toda la fuerza simbólica de Santiago como defensor de la fe.
Su presencia firme y su dinamismo escultórico la convierten en una obra única para aquellos que veneran al Apóstol como guía, protector y patrono de España..