Lámpara Santísimo - Transparente, altura 18 cm

Los cirios y velas litúrgicas son uno de los símbolos más antiguos y universales de la fe cristiana. Desde los primeros siglos, la Iglesia los utiliza como signo visible de Cristo, la luz del mundo, que ilumina las tinieblas del pecado y guía a los fieles hacia la salvación. Su llama representa la presencia viva de Dios, el fervor de la oración y la esperanza del alma que se eleva hacia el cielo.

Encendidos sobre el altar, junto al Sagrario, en las procesiones o en los actos devocionales, los cirios y velas no solo cumplen una función práctica de iluminación, sino que también expresan el espíritu de adoración, respeto y recogimiento que acompaña toda celebración litúrgica.

En El Ángel Arte Sacro ofrecemos una extensa colección de cirios y velas para uso litúrgico y devocional, elaborados artesanalmente en cera natural, parafina refinada o cera de abeja pura, con diferentes diámetros, alturas y acabados. Cada pieza se fabrica con materias primas de alta calidad, garantizando una combustión limpia, uniforme y sin humo, respetuosa con los templos y capillas donde se utilizan.

Disponemos de:

Cirios de altar, ideales para acompañar la celebración eucarística.

Cirios pascuales, símbolo de la Resurrección de Cristo.

Velas votivas, para oración y ofrenda personal.

Velas bautismales y de comunión, para ceremonias sacramentales.

Velas devocionales con imágenes de santos o advocaciones marianas.

Velas eléctricas y de cera líquida, como opción segura y duradera para templos o capillas con uso continuo.

Cada modelo puede presentarse liso, decorado o pintado a mano, con símbolos litúrgicos como cruces, espigas, racimos, corderos o el monograma IHS. También ofrecemos velas personalizadas con nombre, fecha o imagen, especialmente recomendadas para bautizos, primeras comuniones, confirmaciones o aniversarios religiosos.

Los cirios de altar se fabrican en múltiples diámetros (desde 3 hasta 12 cm) y alturas (de 20 a 120 cm), adaptándose a candelabros, portacirios o lámparas de pie. Los modelos de cera líquida permiten una iluminación constante, sin goteo ni residuos, muy práctica para el uso diario en templos.

Más allá de su funcionalidad, la luz del cirio tiene un profundo valor espiritual: es símbolo de fe viva, de oración constante y de esperanza eterna. Cada llama encendida en el altar o ante una imagen es una súplica silenciosa que asciende hacia Dios.

En El Ángel Arte Sacro seleccionamos cirios y velas litúrgicas elaborados por talleres españoles e italianos especializados, cuidando la calidad de la cera, el acabado estético y la presentación. Cada pieza está diseñada para mantener la solemnidad del culto y acompañar la oración con dignidad y belleza.

Más que objetos de iluminación, los cirios y velas son símbolos de fe y de presencia divina, luz que guía al creyente y eleva su alma hacia el Creador. En El Ángel Arte Sacro cuidamos cada detalle para que esa luz arda con pureza, serenidad y belleza en cada celebración y en cada hogar cristiano.

Artesanos Españoles del Arte Religioso en General.

Excelencia, tradición y oficio al servicio del arte sacro.

La expresión “Artesanos Españoles del Arte Religioso” abarca el conjunto de talleres, orfebres, imagineros, bordadores, pintores y pasamaneros que mantienen viva en España la gran tradición del arte sacro, heredera directa de los gremios y cofradías que durante siglos dieron forma al patrimonio devocional de Europa.

Desde los talleres de imaginería andaluza y castellana hasta los bordadores valencianos o catalanes, el arte religioso español destaca por su riqueza técnica, sentido estético y profundidad espiritual. Cada obra nace del trabajo manual de maestros especializados que dominan oficios transmitidos de generación en generación: el tallado en madera, la policromía al temple, el dorado al agua, el bordado en oro fino, la pintura devocional o la confección de ornamentos litúrgicos.

Estos artesanos producen una amplísima gama de objetos: esculturas, retablos, cuadros, bordados, vestiduras sagradas, orfebrería, pasamanería, estandartes y elementos procesionales, todos con la impronta de la escuela española, caracterizada por su realismo, dramatismo y respeto por la iconografía cristiana.

El arte religioso español, tanto en su vertiente popular como en la académica, se distingue por su armonía entre la belleza formal y el mensaje espiritual, ofreciendo piezas destinadas no solo al culto, sino también a la contemplación y a la preservación del patrimonio cultural.

En El Ángel, los Artesanos Españoles representan la columna vertebral de la producción artística religiosa, garantizando obras de autenticidad, nobleza y fidelidad al espíritu cristiano, adecuadas para templos, cofradías, coleccionistas o devoción particular. Cada pieza es un testimonio vivo del talento y la fe que definen al arte sacro español.