Imagen de San Peregrino en resina de poliéster de 20 cm

San Peregrino, religioso de la Orden de los Siervos de María, es patrono de los enfermos de cáncer y de las enfermedades incurables.
Esta figura lo representa de pie, con hábito negro y mostrando con reverencia la llaga de su pierna, signo del sufrimiento que ofreció a Dios con humildad.
Es un poderoso intercesor en momentos de dolor físico, tratamiento médico o dificultad espiritual.
Materiales y diseño.
Figura realizada en resina de poliéster, pintada a mano.
San Peregrino aparece de pie con el hábito negro tradicional, con detalles dorados en los bordes.
En su mano izquierda sostiene un crucifijo al pecho, mientras con la derecha recoge la túnica para mostrar la llaga en su pierna izquierda.
Su expresión es serena y compasiva.
La base circular dorada está decorada con cenefa en relieve.
Medidas.
Altura:
20 cm.
Base:
circular, aprox.
7 cm de diámetro.
Acabado.
Pintura satinada en tonos sobrios.
El rostro está cuidadosamente modelado, y la herida es visible pero discreta, con un tratamiento respetuoso.
El crucifijo tiene relieve y está bien proporcionado.
El hábito presenta pliegues naturales con sombreado en profundidad.
Uso devocional.
Especialmente indicada para personas que padecen enfermedades graves, para familiares que desean encomendar a sus seres queridos, o como figura devocional en hospitales, clínicas, oratorios personales o altares de oración por la salud.
Resumen.
Una imagen sobria y llena de compasión que transmite fe y esperanza en medio del sufrimiento.
San Peregrino nos recuerda que la gracia puede sostenernos incluso en la cruz de la enfermedad.