Descripción |
San Humberto, patrón de los cazadores, es conocido por su conversión tras un encuentro sobrenatural con un ciervo que llevaba un crucifijo entre sus astas. Esta imagen lo representa en el instante decisivo de esa aparición, con gesto de sorpresa y reverencia desde su montura. La escena transmite fuerza, fe transformadora y simbolismo espiritual. Materiales y diseño. Talla realizada a mano por escultores artesanos de Val Gardena en madera de arce o tilo. San Humberto aparece montado sobre un caballo blanco alzado, con atuendo de caza y sombrero emplumado. Porta una espada en el cinto y se inclina hacia el ciervo, que reposa sereno en el suelo con una cruz entre las astas. Todo el conjunto se apoya sobre una peana barroca decorada en dorado, verde y marfil con molduras y volutas. Medidas. Altura: a elegir con el selector. Base: barroca y decorada, con escudo central en tonos crema y dorado. Acabado. Policromía rica, con tonos tierra, rojo burdeos, verde bosque, dorado y marfil. La armadura, el pelaje del caballo y el cuerpo del ciervo están esculpidos con gran realismo. Los pliegues del manto y la expresión del rostro de San Humberto están llenos de dinamismo y detalle. La cruz dorada entre las astas resalta con fuerza simbólica. Uso devocional. Ideal para capillas rurales, parroquias patronales, asociaciones de cazadores, casas de retiro o espacios vinculados a la naturaleza y la espiritualidad. También recomendada como figura de contemplación sobre la conversión interior. Resumen. Una talla con gran fuerza narrativa y profundidad simbólica. San Humberto, testigo del poder de la gracia, aparece aquí como modelo de transformación personal a través del encuentro con Dios. Una imagen perfecta para unir devoción y arte sacro con mensaje espiritual..
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