Este copón de formato bajo combina funcionalidad con elegancia litúrgica.
Su tapa grabada con espigas y su base decorada en relieve lo convierten en una pieza práctica y estéticamente cuidada, ideal para celebraciones de alta participación o reserva prolongada.
Materiales y diseño.
Fabricado en metal con baño dorado, presenta una copa de gran capacidad, lisa y pulida, asentada sobre una base circular decorada con estrías verticales y pequeños relieves en todo su contorno.
La tapa está grabada con un motivo de espigas y se remata con una cruz circular calada y una piedra roja en el centro, que añade un toque simbólico y ornamental.
Medidas.
Diámetro:
16 cm.
Altura aproximada:
formato bajo (estimado entre 10–12 cm).
Uso litúrgico.
Ideal para custodiar 250 a 300 formas, este copón es perfecto para celebraciones comunitarias, misas dominicales, exposiciones prolongadas o reserva en sagrarios amplios.
Su diseño compacto facilita el acceso y la manipulación durante la distribución de la comunión.
Una pieza simbólica y funcional para custodiar el Santísimo Sacramento con dignidad, elegancia y sentido litúrgico..

Este copón combina la tradición litúrgica con un estilo contemporáneo.
Su acabado martillado y el contraste elegante del nudo negro le dan una presencia sobria y moderna, ideal para celebraciones eucarísticas con gran asistencia.
Materiales y diseño.
Fabricado en latón y chapado en oro, presenta una copa y base con acabado martillado que aporta textura y refleja la luz con elegancia.
El nudo central, en tono negro lacado, ofrece un contraste visual distintivo y proporciona un agarre cómodo.
La tapa está rematada con una cruz calada de estilo celta, símbolo de fe y reverencia.
Medidas.
Altura:
24 cm.
Diámetro de la copa:
15 cm.
Capacidad:
aproximadamente 315 formas de 3 cm de diámetro.
Uso litúrgico.
Perfecto para concelebraciones, distribución del Santísimo en grandes comunidades o reserva prolongada en el sagrario.
Su diseño moderno y solemne lo hace adecuado para parroquias actuales, capillas contemporáneas o templos con mezcla de estilos.
Una pieza litúrgica de gran capacidad, elegancia visual y profundo simbolismo, pensada para custodiar el Santísimo con dignidad y estilo..

Esta figura de San Antonio de Padua con el Niño Jesús presenta un acabado especial en tonos dorados, resaltando su carácter festivo y ornamental.
San Antonio, patrón de los objetos perdidos y gran predicador franciscano, aparece en una actitud cercana y afectuosa con el Niño Jesús, quien toca con ternura el rostro del santo.
Materiales y diseño.
Figura modelada en resina de poliéster con aplicación de pintura en acabado dorado.
El santo sostiene en brazos al Niño Jesús desnudo, quien se apoya sobre un libro, símbolo de la Palabra.
San Antonio viste el hábito franciscano con textura rica en brillos y reflejos metálicos.
La figura se presenta en estuche de PVC con ficha devocional incluida.
Medidas.
Altura:
11 cm.
Base:
5 x 3 cm.
Acabado.
Acabado brillante con predominancia de dorados, con reflejos metalizados que realzan la escena.
El contraste entre los detalles del rostro, el Niño Jesús y el dorado del hábito da como resultado una pieza visualmente impactante.
La pintura es rica en textura y aporta profundidad a los pliegues del modelo.
Uso devocional.
Ideal para pequeños altares, vitrinas, escritorios, o como detalle espiritual en celebraciones religiosas.
Muy apropiada también como regalo decorativo para quienes valoran la figura de San Antonio en una presentación más artística y llamativa.
Resumen.
Una figura devocional con acabado ornamental que combina fe y arte.
San Antonio con el Niño, en versión dorada, es símbolo de luz, protección y cercanía con el Señor en los detalles más sencillos de la vida..