Escultura de San Sebastián, mártir del siglo III, soldado romano convertido al cristianismo y venerado como protector contra epidemias y pestes.
Esta representación, realizada por Imagineros de Olot, recoge la iconografía tradicional con fuerza, serenidad y un alto contenido espiritual.
Materiales y diseño.
Modelada en pasta de madera y pintada completamente a mano, la figura presenta a San Sebastián atado a un tronco, con taparrabos rojo decorado con motivos dorados y cuerpo atravesado por flechas.
La postura, ligeramente inclinada y con rostro elevado, transmite resignación, pureza y fe en medio del sufrimiento.
Los ojos de cristal aportan profundidad y realismo a la expresión.
La base es marmoleada, de perfil octogonal.
Medidas.
Tamaño a elegir con el selector.
Disponible en distintas alturas, ideal para parroquias rurales, altares votivos, capillas de sanación, pueblos bajo su patronazgo o espacios de oración por los enfermos.
Acabado.
Acabado a elegir con el selector.
Opciones:
normal, policromado, pan de oro o extra.
Uso devocional.
Especialmente recomendada para quienes veneran a San Sebastián como intercesor contra enfermedades, protector de comunidades rurales o testigo del martirio.
Muy adecuada para procesiones patronales o celebraciones votivas.
Resumen.
Una imagen de gran carga emocional y estética, que une belleza clásica con testimonio cristiano.
Obra de Imagineros de Olot, ideal para representar el valor de la fe firme ante la persecución..