San Luis Gonzaga, joven jesuita y patrono de la juventud católica, es ejemplo de pureza, entrega total a Dios y vida consagrada desde temprana edad.
Esta imagen lo representa con expresión serena y mirada elevada, sosteniendo un crucifijo y un ramo de lirios, símbolos de su amor por Cristo crucificado y de su pureza interior.
Su aureola dorada en rayos refuerza su santidad luminosa.
Materiales y diseño.
Figura tallada a mano por escultores de Val Gardena en madera de arce o tilo, según el tamaño.
San Luis aparece de pie, con hábito blanco y capa ligera, bordes dorados y túnica rojiza interior.
En su mano izquierda lleva un crucifijo que contempla con ternura, y en la derecha un ramo de lirios.
La aureola de rayos dorados está fijada sobre la cabeza, resaltando su santidad juvenil.
Medidas.
Altura:
a elegir con el selector.
Base:
redonda, con suelo rocoso esculpido y moldura dorada.
Acabado.
Talla completamente artesanal, policromada a mano con colores delicados:
blanco marfil, rojo pálido, dorado y beige.
La expresión de San Luis es dulce, joven y contemplativa.
El lirio tiene pétalos definidos en blanco y verde, y el crucifijo está esculpido con gran realismo.
La aureola resalta por su detalle dorado en rayos simétricos.
El conjunto es elegante, luminoso y espiritual.
Uso devocional.
Ideal para colegios, grupos juveniles, comunidades vocacionales, capillas educativas, oratorios personales o como regalo en confirmaciones, primeras comuniones o aniversarios religiosos.
También muy adecuada para parroquias o instituciones que trabajan con jóvenes.
Resumen.
Una imagen luminosa y profundamente inspiradora.
San Luis Gonzaga, santo joven y fervoroso, sigue siendo guía para quienes desean vivir su juventud en fidelidad a Cristo.
Esta talla combina pureza, elegancia y profundidad espiritual en una sola figura devocional..