Figura tradicional de San Antonio Abad, eremita del desierto, padre del monacato cristiano y patrono de los animales, del campo y de quienes sufren enfermedades de la piel.
Esta escultura, elaborada por Imagineros de Olot, sigue fielmente la iconografía y el estilo devocional de más de cien años de historia escultórica religiosa en España.
Materiales y diseño.
Hecha en pasta de madera con ojos de cristal y pintada a mano, esta representación de San Antonio lo muestra con hábito marrón de estilo franciscano, barba larga, libro de oración y báculo de peregrino.
A sus pies aparece un cerdito, símbolo inseparable de su patronazgo sobre los animales.
La aureola dorada y la medalla en el pecho destacan su santidad y autoridad espiritual.
El conjunto se apoya sobre una base marmoleada sobria y firme.
Medidas.
Tamaño a elegir con el selector.
Disponible en varias alturas para adaptarse a capillas rurales, altares, vitrinas o celebraciones patronales.
Acabado.
Acabado a elegir con el selector.
Opciones disponibles:
normal, policromado, pan de oro o extra.
Uso devocional.
Ideal para parroquias del medio rural, cofradías de San Antón, clínicas veterinarias o espacios donde se bendicen animales.
También es una figura de gran valor espiritual para quienes valoran la vida de oración, soledad y silencio.
Resumen.
Una escultura de fuerte carga devocional y visual, fiel al estilo de Imagineros de Olot.
San Antonio Abad aparece aquí como modelo de santidad austera, guía espiritual y protector de la creación..